¿Por qué nos casamos?

Porque lo impone la sociedad. 

 

En primer lugar si pensáramos con detenimiento lo que supone casarse, mucha gente no se casaría. 

El número de divorcios cada vez es mayor. 

Muchas familias están rotas.

Por lo tanto, los jóvenes de hoy prefieren no casarse. 

Son muchos los que viven con su pareja y no han dicho el: “Sí, quiero”. 

No es raro que parejas solteras tengan hijos. 

 

En segundo lugar, al no estar casado, en caso de conflicto con tu pareja, sería muy sencilla la separación. 

Un divorcio tiene muchas complicaciones legales. 

Pero lógicamente, cuando una persona se casa, no piensa que tarde o temprano se divorciará. 

 

Para finalizar, todos somos libres de tomar nuestra propia decisión. 

Yo me casé y no me arrepiento de ello.

Pero ya no soy joven y pienso diferente.