El número de los coches eléctricos en España sigue aumentando, pero todavía representa solo el 0.8% de las matriculaciones totales.
Con las nuevas normas europeas para reducir las emisiones de CO2, los españoles tendrán que cambiar sus coches por los eléctricos.
El precio y el escaso número de puntos para recargar son uno de los mayores obstáculos que impiden a los españoles decidir comprar un coche eléctrico.