Si vas por el campo y ves unos arbustos de lavanda, te aconsejo que frotes las manos con ellos.
Luego huele las manos.
Olerán genial.
Recuerdo cuando era pequeño e iba con mi familia al campo, siempre frotábamos las manos con lavanda.
Ahora sigo frotando las manos cuando veo lavanda.